La reforma de Córdoba constituye un hito en la transformación de la educación universitaria en la región y el mundo.  En el año 2018 se presenta una interesante convergencia para la educación superior del continente; por una parte, se cumplen cien años de la revuelta estudiantil y la elaboración del Manifiesto Laminar de Córdoba y, por la otra, es la fecha contemplada por la UNESCO para la realización de la III Conferencia Regional del sector.  Por ello, la Universidad Nacional de Córdoba, Argentina, el Ministerio de Educación de esa nación y el Instituto para la Educación Superior en América Latina y el Caribe (IESALC) de la UNESCO, mediante la cooperación de gobiernos de la región, han decidido convocar para junio de 2018 a un evento que comparte la agenda de ambos procesos.

La III Conferencia Regional de Educación Superior: A 100 años de Córdoba será la continuación de las anteriores citas en la Habana (1996) y Cartagena (2008) que construyeron un balance de la educación del tercer y cuarto nivel educativo y, establecieron líneas prospectivas respecto a las necesarias transformaciones que demandan nuestras sociedades respecto a la universidad.  Para ello se han seleccionado siete grandes temas orientadores que guían los debates.

El primero, referido al rol estratégico  de la Educación Superior en el desarrollo sustentable de América Latina y el Caribe, que pasa por discutir la misión y los objetivos de la ES  como un derecho humano, un bien público y social y un deber de los Estados; el rol de la ES en la formación en conocimientos, capacidades críticas y valores humanos  y sociales para el ejercicio de una ciudadanía reflexiva y activa; la autonomía de las instituciones como derecho y condición para la libertad académica, con compromiso social; la gobernanza de la ES. Participación de los claustros en la educación superior; el rol de los estados de la región en la SES. Financiamiento y rendición de cuentas; las instituciones de ES como interlocutoras privilegiadas de los tomadores de decisiones de políticas públicas en los tres niveles del Estado: nacional, provincial/estadual y  municipal; la posición del SES regional frente a los procesos de mercantilización, los acuerdos con la OMC y la oferta transnacional de la ES; la  Educación Superior de gestión pública y gestión privada.

El segundo, la Educación Superior como parte del sistema educativo en América Latina y el Caribe, impulsando amplios debates respecto a la la ES como bien público, social, un derecho humano y universal y un deber de los Estados; la calidad con inclusión/ calidad como derecho humano /calidad con pertinencia y atención a la diversidad;  la evaluación institucional y la acreditación de carreras de grado y de postgrado,  de modo continuo para el mejoramiento de la calidad de la ES; la educación superior en la “sociedad del aprendizaje”. Curriculum universitario: diversificación, flexibilidad y articulación curricular y reconocimiento de trayectorias académicas entre instituciones universitarias y no-universitarias; la expansión y consolidación de la matrícula pos-secundaria, ampliación y diversificación de la oferta, innovación de las estructuras institucionales y de las propuestas académicas; mecanismos de apoyo para los estudiantes: becas y otros mecanismos de garantizar la igualdad de oportunidades;  la formación de profesores, el fortalecimiento de la investigación pedagógica y la producción de contenidos educativos para todo el sistema educativo y muy especialmente para el nivel medio; los postgrados: enseñanza e investigación con calidad y pertinencia; la educación virtual. El impacto del acceso abierto y la tecnologías de la información y comunicación en la ED de la región. Nuevos paradigmas con garantías de calidad. Inclusión digital.

El tercero, referido a la Educación Superior y la identidad cultural de  América Latina y Latina, para la cual se construye una agenda de bates centrada en el valor de pluriuniversidad; la ES con pueblos originarios y afrodescendientes; el diálogo de saberes, reconocimiento de la diversidad de valores, saberes y modos  de aprendizajes. Certificación de saberes.

En la actual etapa de la mundialización cultural emerge un tema con especial relevancia, el cual sera el cuarto punto de agenda de la CRES 2018, la Educación Superior, internacionalización e integración regional de América Latina y el Caribe. Para su desarrollo se contemplan debates relacionados a las cosmovisiones y modelos de internacionalización e integración regional solidaria; la cooperación académica, científica y tecnológica e integración: Políticas, programas e instrumentos; la acreditación y reconocimiento regional  de titulaciones para el desempeño profesional. Doble titulación: la movilidad académica, becas, estudiantes internacionales; las redes de cooperación académica, científica y tecnológica para la integración regional; los programas de movilidad académica de postgrado e investigación; la posición del SES de América Latina y Caribe frente al proceso de transnacionalización de la ES.

Un quinto eje temático está relacionado al rol de la ES de cara a los desafíos sociales de América Latina y el Caribe, para cuyo logro se abre una agenda de debates que enfatiza en la tercera función de la ES: Extensión y cooperación con compromiso social, pertinencia, calidad e inclusión; la ES como generadora de derechos, igualdad y justicia social; la ES en diálogo constructivo con las organizaciones sociales; el papel de la educación superior en la reconversión laboral  y en la formación a lo largo de la vida, en estructuras formales y no formales. Formación en oficios, formación continua y formación para la tercera edad . Educación en contextos de encierro.

El sexto tema de la CRES es la investigación científica y tecnológica  y la innovación como motor del desarrollo humano, social y económico de América Latina y el Caribe.  Este punto, de especial interés regional está enmarcado enmarcado en una ruta de foros y debates sobre la necesidad de una agenda regional de Ciencia y Tecnología e Innovación Productiva. Integración regional y  producción de conocimiento; la educación Superior, Estados,  organizaciones sociales y  sector productivo  para construcción de nuevos paradigmas de sustentabilidad y desarrollo en América Latina y el Caribe; la vinculación de la ES con el sector productivo para la cooperación científica,  tecnológica y la innovación productiva. Alianzas estratégicas con los tres niveles del Estado: nacional, provincial/estadual y  municipal. Alianzas estratégicas con pequeños y medianos productores, PYMES, asociaciones y cooperativas de la producción.

El séptimo eje temático es en si mimo una agenda permanente y abierta de discusión respecto a la valoración de la Reforma Universitaria de Córdoba a 100 años de su irrupción en la agenda mundial. En este sentido se aspira construir un nuevo Manifiesto de la Educación Superior Latinoamericana que reconozca sus potencialidades, realidades y desafíos.

Para garantizar la mayor participación ciudadana y de los actores fundamentales de la educación superior se han construido diversos mecanismos de participación a partir de estos ejes temáticos.  Una herramienta que guarda especial importancia en esta ruta lo constituye el foro debate público, en la página web de la CRES, el cual será lanzado el 1 de junio de 2016, y que estará abierto durante cuatro meses, para incorporar todas las voces a las reflexiones de Córdoba 2018.

Venezuela en la ruta de la CRES 2018

Esta tercera Conferencia Regional de la Educación Superior (CRES 2018) coincide con la convocatoria a una Asamblea Nacional Constituyente que actualice la carta Magna de 1999 y abra paso a un nuevo pacto social. En ese contexto, el desarrollo del capítulo educativo de la ANC posibilita incorporarnos a la ruta de debates de la cita regional de UNESCO con la fuerza y la pertinencia de un proceso político que ha hecho de lo educativo uno de sus vértices centrales.  Nuestra propia realidad nos impone discutir la agenda general, pero también la particularidad y desafíos de nuestra transformación universitaria.

Y allí una serie de interrogantes o preguntas generadoras emergen.  Algunas de ellas están referidas a preguntarnos ¿si es correcto continuar creando universidades a partir de facultades y carreras?  Para romper la brecha del conocimiento entre países avanzados y el nuestro ¿no será necesario construir las futuras universidades a partir de centros de investigación y no de facultades?  La ruta de construcción universitaria del pregrado al postgrado ¿es la correcta?  Acaso no será necesario pensar una ruta de construcción del postgrado al pregrado a partir de su eclosión de centros de investigación?

¿Es posible seguir creando carreras sin fecha de expiración cuando las posibilidades de empleo en una u otra rama son finitos?  ¿qué perfil de profesor universitario se requiere para una universidad que abre y cierra carreras conforme a la demanda de los contextos locales?  ¿estamos utilizando todas nuestras posibilidades tecnológicas en el desarrollo de la educación universitaria del siglo XXI?  ¿cómo se cruzan proyectos de liberación nacional con universidad en el presente?

Los debates y reflexiones respecto a nuestra universidad no se agotan allí, pero estamos profundamente convencidos que esta confluencia, entre la CRES 2018 y la ANC 2017 en Venezuela, debe ser una oportunidad imperdible para pensar otra universidad posible para otro mundo posible.